La acción de clasificar el mundo por medio de etiquetas la concibo como una costumbre adquirida a través de los años, una
necesidad que la sociedad ha impuesto para no sentirse en el vacío del
“desconocimiento”. Hemos heredado una costumbre vana donde necesitamos tener el
control sobre lo que nos rodea, al darle nombre creemos ingenuamente que
podemos tener control sobre él. Términos como homosexual, heterosexual y
afrodescendiente son un ejemplo de lo que yo llamo: “la cultura de las
etiquetas”, cabe aclarar que algunas etiquetas no son tan bien vistas como
otras, por el contrario generan discriminación, cuestionamientos y discusiones
sobre lo que es correcto o no.
Hoy quiero hablar sobre Mariposas Verdes, un libro del escritor
colombiano Enrique Patiño y distribuido en Colombia por Ediciones B. Su
historia está basada en hechos de la vida real que sucedieron en Bogotá, pero
que en mi opinión, pasa en muchos rincones del mundo. El matoneo son aquellas
acciones verbales, físicas o psicológicas
que tienen como fin maltratar al otro –eso a grandes rasgos-, no creo
que nadie haya estado exento de vivir una situación de este tipo, ya sea
como víctima, victimario, cómplice o testigo.
Mariposas verdes nos narra la
historia de Mateo, un joven de 16 años quien pertenecía a un colegio prestante
de la ciudad de Bogotá. Los sucesos se desarrollan por medio de una carta
dirigida a Daniel, su mejor amigo. El escrito es una recopilación de los
aconteceres más relevantes de la vida de Mateo; la primera vez que deseó volar
al ver un grupo de mariposas verdes, el momento en que su familia se fragmenta,
crecer bajo el cuidado de su abuela, la ausencia de sus padres, estudiar en un
colegio donde era incomprendido por compañeros, docentes y directivos. Estos
hechos marcaron su existencia, pero también le permitieron crecer en mente,
cuerpo y espíritu.
Como lector quedé atrapado por la
historia de Mateo, un personaje fuerte, pensante, crítico, decidido,
resiliente, rebelde, anarquista como se autodenomina; con una inagotable sed de
conocimiento y una inalcanzable pasión por los libros. Las características que
Patiño depositó sobre Mateo lo hacen un personaje envidiable en muchos
aspectos, o por lo menos cuando leía,
afloraba en mí ser un sentimiento de
envidia por un joven de casi 17 años con una sensibilidad por el mundo y el
arte tan profunda, con una postura y visión frente a la sociedad tan clara a
una edad tan corta. Ya hubiera querido yo en mi adolescencia entender todo lo
que Mateo ya entendía sobre el amor, el cuerpo y los sentires del mundo.
Leer la historia de Mateo fue una
experiencia enriquecedora, el pasar de las hojas me develaban un personaje sin
ideologías, con muchas preguntas hacia sus familiares, amigos, profesores y
compañeros de clase. A nuestro protagonista lo defino como un terremoto que
con valentía, decisión y sin temor a expresar lo que sentía; sacudió a lo largo
de sus existencia la vida de sus seres cercanos de maneras inesperadas.
Quiero retomar lo tratado sobre
las etiquetas, me parece importante mencionar que Mateo no se identificaba con
ellas, era un ser libre a la hora de amar, entendió a su corta edad que el amor no se limita a un
género o cuerpo. Se dedicó amar sin prejuicios ni temores, se lo hizo saber al
mundo, pero el mundo, su mundo, no estaba preparado para ello.
Imagen tomada del perfil en facebook: Película Mariposas verdes |
Ser un personaje tan diferente en
un entorno tan común, fue su talón de Aquiles, las agresiones, limitaciones, el
señalamiento y la incomprensión manifestada por parte de aquellos que lo querían hacer “encajar", nunca lo hicieron desfallecer, se mantuvo fuerte, resistente y
comprensivo. Me parece valioso resaltar que a pesar de ver como su mundo se desmoronaba
a través de los golpes y las injusticias, nunca se mostró como un personaje al
que le pudiéramos tener lástima. Por el contrario, su coraje y comprensión por
aquellos que lo lastimaban física o verbalmente se mantuvo sin dejar ser él
mismo.
El final de Mariposas Verdes es
la consecuencia de la acumulación de sucesos por los que transita su personaje
principal. Mateo toma una decisión y la justifica de una manera tranquila,
donde sus argumentos me parecen valiosos, pero no válidos. Es bello ver su deseo
por dejar un precedente para aquellos que le generaron cicatrices en su cuerpo
y alma, para un mundo tan injusto y tan dividido en el cual él no sentía que
pudiera encajar. No obstante pienso que el mundo y su diversidad están abiertos para que busquemos
lugares donde realmente nos sintamos cómodos, amados y acompañados, nada ni
nadie debe generar precedentes negativos en nuestra existencia. Me parece importante entender que nuestra misión en la vida es ser felices y debemos jugárnosla toda
para lograr nuestro cometido, eso también nos lo explica nuestro protagonista
en las últimas páginas de su escrito.
Por otro lado quiero hablar
sobre la sencillez, un término que a veces nos predispone porque estamos
acostumbrado a la grandilocuencia, pero a veces esa sencillez es tan
perfecta que se vuelve necesaria. El autor de Mariposas Verdes en sólo 143
páginas nunca me soltó, me mantuvo alerta e interesado en la historia, me
movilizo por medio de analogías bien logradas, flexiones necesarias sobre la
sociedad y la vida por la que atravesamos. Este es un libro al alcance de
niños, jóvenes y adultos que trata un tema del cual necesitamos reflexionar y
aprender.
Para finalizar quiero contarles que Mariposas Verdes tendrá una adaptación cinematográfica que se estrenará el 20 de Julio del 2017 en Colombia. El director y productor es Gustavo Nieto Roa y contará dentro de su elenco con Deivi Duarte (Mateo) y Kevin Bury (Daniel). Al final de la reseña podrán encontrar el link a su trailer.
Andrés Caicedo… como el escritor.
Trailer de la película Mariposas Verdes
Cada vez que leo, veo y escucho algo sobre mariposas verdes me emociono mucho. personalmente, no me gustan las películas que se hacen en Colombia porque todas recaen en lo mismo, drogas, guerras y comedia que en algunos casos no hace reír pero "igual vende y es lo importante" en la película de mariposas verdes, vi algo diferente que al instante me hizo contar los días para el estreno y puede ser el ejemplo de que en Colombia si se pueden hacer grandes películas. es una historia que estoy dando a conocer a mis amigos y que también se han conmovido mucho, este proyecto es algo muy bonito y con la ayuda de todos tendrá el reconocimiento que se merece. me gustó la reseña, estuve emocionado leyendo cada palabra de tu reseña jajaja :D
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ResponderEliminarExcelente ensayo, sigue escribiendo, no he leído el libro, ni visto la película; tu blog me motivo ha hacerlo!!!
ResponderEliminarVeo que aborda unos de los temas conflictivos del momento...
que bonita película esta hermosa pero lo que dice en su reseña es muy diferente a la película pero de todas formas me gusta mucho <3
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